Una joven rumana, Elena, es contratada como ama de llaves de una pareja danesa, Louise y Kasper. Aunque son ricos, la pareja elige vivir en una casa en el lago sin electricidad, cultivar sus propios alimentos y criar gallinas. Su única conexión con el mundo exterior es un teléfono fijo. Louise se está recuperando de una operación y necesita ayuda extra en la casa. Aunque Elena se siente incómoda con el inusual aislamiento de la casa, por lo demás se adapta fácilmente. También conoce a Leo, un sanador espiritual y amigo de Louise que intenta ayudar a Louise a recuperarse más rápidamente purgando la mala energía de su cuerpo.

Elena y Louise establecen rápidamente un vínculo, y Elena le cuenta a Louise que está ahorrando dinero para que ella y su hijo, que actualmente viven con los padres de Elena, puedan tener una casa propia. Louise, a su vez, le confía sus dificultades para concebir un hijo propio. Louise le pide a Elena que acepte ser una madre de alquiler para ella y Kasper. A cambio, comprarían un apartamento para Elena después de que diera a luz. Para disgusto de sus padres, Elena acepta y se le implanta uno de los óvulos congelados de Louise.

Aunque el médico le asegura que todo va bien, Elena empieza a sentirse rara después de la implantación y nota una serie de sucesos extraños: las gallinas se aterrorizan de ella, empieza a alucinar sonidos e imágenes y sufre pesadillas. En una de ellas, da a luz a un bebé muerto; en otra, una Louise ensangrentada le habla de alguien llamado "Shelley". A medida que el embarazo avanza, Elena pierde peso, está constantemente agotada, le sangran las encías y experimenta antojos de embarazo inusuales y poco saludables que la perturban. Leo, que intenta ayudar a Elena en su difícil embarazo, percibe una mala energía procedente de su vientre. Elena cree que el bebé la está matando, pero cuando expresa sus preocupaciones a su médico, éste insiste en que el bebé está sano y que todas sus dificultades son normales. También le revela que su bebé es una niña, pero cuando Elena pide ver una ecografía, la máquina se estropea misteriosamente.

A medida que avanza el embarazo, el estado de Elena empeora hasta que sufre dolores casi constantes, lo que obliga a Louise a convertirse en su cuidadora. Una noche, durante un baño, Elena reacciona con dolor cuando el agua la toca, lo que hace que se rompa y golpee su propio vientre mientras grita que quiere sacar al niño. Esa misma noche, Louise encuentra a Elena deambulando aturdida, tras haber atacado e intentado comerse una gallina viva de su gallinero. Louise teme que si Elena vuelve a casa, sus padres se queden con ella y el bebé para siempre. Acuerdan mantener a Elena en la casa del lago y cuidarla hasta que nazca el niño, pero una tarde, cuando Louise deja a Elena sin vigilancia, regresa y descubre que Elena ha intentado hacerse un aborto con una aguja de tejer. Elena muere de una hemorragia interna, pero el bebé sale ileso.

Kasper y Louise llaman a la niña Shelley y Louise la adora al instante. Shelley comienza a mostrar algunos de los mismos comportamientos extraños que Elena: las gallinas le temen y grita de dolor cuando se le echa agua encima. Cuando Leo visita la casa, percibe tal maldad en Shelley que se ve obligado a huir, para sorpresa de Louise. Pronto, Kasper también se siente incómodo cerca de Shelley, insistiendo en que hace ruidos extraños que Louise no oye pero que llevan a Kasper a un extraño estado de conmoción en el que se vuelve completamente insensible, hasta el punto de que ni siquiera reacciona cuando se corta accidentalmente la pierna mientras corta leña. Louise no cree nada de esto y está molesta porque Kasper no parece querer a su hija.

Louise se despierta en mitad de la noche y descubre que Shelly ha desaparecido. Sale corriendo y encuentra a Shelley con Kaspar, que las ha encerrado a ambas en el coche con el motor en marcha en un aparente intento de suicidio por monóxido de carbono. Louise rescata a Shelley y asesina a Kasper golpeando su cabeza repetidamente contra la puerta del coche. Conmocionada, Louise se sienta en la cama con Shelley mientras una figura no identificada vestida de negro está en la habitación con ellas antes de desaparecer repentinamente. Louise y Shelley se quedan solas, sin explicación alguna de los acontecimientos de la película.