Magdalena, una niña de catorce años de una familia mexicana americana de clase trabajadora de Echo Park, Los Ángeles, asiste a la quinceañera de su prima Eileen, una extravagante ceremonia de mayoría de edad para celebrar su decimoquinto cumpleaños. El hermano mayor de Eileen, Carlos, que ha sido repudiado por su familia debido a su homosexualidad y que ahora vive con su tío abuelo Tomás, llega a la celebración pero es obligado a marcharse por su padre.

La propia Magdalena está a punto de cumplir quince años, pero sus padres no pueden permitirse una fiesta de quince años tan fastuosa como la de Eileen, y le niegan sus reiteradas peticiones de alquilar una limusina Hummer para la ocasión. Mientras se prepara para su fiesta de quince años, Magdalena se entera de que está embarazada de su amigo Herman, a pesar de que sólo han mantenido relaciones sexuales sin penetración una vez.

Su padre, de religión cristiana, se enfurece al creer que Magdalena ha tenido relaciones prematrimoniales a pesar de sus protestas de que sigue siendo virgen. Deja a su familia para irse a vivir con Tomás y Carlos y sigue viendo a Herman hasta que descubre que su madre lo ha enviado a vivir con unos parientes para evitar que vea a Magdalena.

Carlos se involucra sexualmente con la pareja gay caucásica, James y Gary, que recientemente han comprado la propiedad de Tomás y ahora son sus caseros y vecinos, pero finalmente comienza un romance secreto con Gary sin que James lo sepa. Ante el avance del embarazo de Magdalena, Carlos se ofrece a apoyarla económicamente y a actuar como padre sustituto del niño una vez que nazca. Cuando James descubre la aventura de su pareja con Carlos, se siente traicionado y Tomás no tarda en recibir una carta en la que se le notifica que sus caseros le van a desahuciar.

Tomás, Magdalena y Carlos luchan por encontrar un lugar asequible para vivir debido a la gentrificación de la zona y al aumento de los precios inmobiliarios, pero Tomás muere mientras duerme poco antes de que los desalojen. A raíz de esto, Magdalena se reúne con su madre y juntos visitan a un ginecólogo, que confirma que Magdalena concibió sin tener relaciones sexuales con penetración. El padre de Magdalena le pide perdón en el funeral de Tomás, creyendo que su concepción fue un milagro, y ella le perdona.

Finalmente, Magdalena recibe la fiesta de quince años que deseaba, con una limusina Hummer, con la presencia de sus padres y Carlos como acompañante.