Fiona (Julie Christie) desarrolla Alzheimer y está tristemente separada de su marido Grant (Gordon Pinsent) durante 30 días en un hogar comunitario. En una visita después de los 30 días, su esposa se olvida de quién es y desarrolla una relación con un discapacitado Aubrey (Michael Murphy). Pero, de repente Aubrey es sacado del hogar comunitario por su esposa Marian (Olympia Dukakis), y Grant comienza a notar una profunda tristeza en Fiona.

Grant ahora quiere devolver a Aubrey al hogar comunitario para que su esposa pueda ser feliz. Así que en un día especial, Grant obtiene el permiso de Marian para poner a Aubrey en el hogar comunitario para siempre. Ambas conducen al hogar comunitario y se paran frente a la puerta de Fiona y sólo Grant entra primero.

Mientras habla con Fiona, ella comienza a decirle lo amable que ha sido en el pasado y le da las gracias. Grant se sorprende de que ella lo recuerde. Entonces nos damos cuenta de que Fiona está teniendo una explosión de memoria, común en la mayoría de los casos de Alzheimer. Ambos le dan un gran abrazo y sus últimas palabras son, "Podrías haberte ido, pero en vez de eso me abandonaste".