Franck es un visitante habitual de una playa nudista y de los bosques que la rodean, ambos un popular destino de crucero para los hombres homosexuales. Se hace amigo de Henri, un hombre mayor que busca la soledad en la playa tras romper con su novia, y de Michel, un hombre guapo por el que Franck se siente atraído al instante.

Una noche, Franck observa cómo Michel ahoga a otro hombre en el lago. Aunque está aterrorizado por lo que ha visto, Franck no puede resistirse a la atracción que siente por Michel y continúa persiguiéndolo. Cuando se descubre e identifica el cuerpo del hombre ahogado, un investigador de la policía comienza a interrogar a los hombres en la playa; Franck le dice al investigador que no vio nada extraño la noche en que el hombre se ahogó. La relación entre Franck y Michel progresa, aunque Franck se siente cada vez más frustrado por la negativa de Michel a reunirse con él en otro lugar que no sea la playa.

Henri, que ha intuido correctamente los acontecimientos de los últimos días, advierte a Franck sobre Michel. Cuando Franck va a nadar, Henri se enfrenta a Michel y le dice que sabe que es el asesino. Henri se va a dar un paseo por el bosque, echando una mirada a Michel mientras se marcha. Cuando Franck regresa, descubre que la playa está repentinamente desierta. Se adentra en el bosque, donde ve a Michel alejándose de una zona de hierba alta. Al entrar en la hierba, encuentra a Henri, que ha sido degollado. Henri le dice que ha conseguido lo que quería. Franck, ahora perseguido por Michel, corre hacia el bosque para esconderse. Ve a Michel correr hacia el inspector, al que apuñala en el estómago con un cuchillo.

Cae la noche y Franck sigue escondido. Michel llama a Franck diciendo que necesita su amor y que quiere pasar la noche con él. Franck no responde y Michel se aleja para buscarlo en lo más profundo del bosque. Al cabo de un tiempo, Franck se levanta de su escondite y grita repetidamente el nombre de Michel.