Lexi Archer es una adolescente que, tras el divorcio de sus padres, se traslada con su madre Kathryn y su hermana pequeña Jill de Chicago a Seattle. En su nuevo colegio, se hace amiga de Jennifer Harnsberger, una popular estudiante de sobresaliente a la que conoce durante las pruebas de voleibol. Después de que su entrenador de voleibol le sugiera a Lexi que pierda algunos kilos para mejorar su rendimiento deportivo, empieza a buscar formas de hacer dieta. Cuando Jennifer admite ser bulímica, deciden hacer dieta y ejercicio juntas.

Kathryn se da cuenta de que su hija come menos y está más delgada, pero está demasiado ocupada con su divorcio para darse cuenta de que hay un problema. Lexi se vuelve experta en ocultar la verdadera naturaleza de sus hábitos alimenticios. Mientras tanto, Lexi y Jill visitan a su padre en Chicago e intentan convencerle de que se reúna con Kathryn, pero pronto descubren que está saliendo con una nueva mujer, Jolene.

Kathryn empieza a sospechar de un trastorno alimenticio cuando descubre que Lexi lleva más de tres meses sin tener la regla. Consulta a un ginecólogo, pero éste le dice que Lexi tiene un peso normal. Atribuye la pérdida de peso de Lexi al trauma del divorcio. En la consulta del médico, Lexi parecía pesar más porque se había colocado clandestinamente ocho fajos de monedas en el cuerpo para aparentar más peso.

Mientras tanto, ella y Jennifer se plantean ser modelos. Les entusiasma que Nick McKay, un fotógrafo, se ponga en contacto con ellas, pero él sólo se interesa por Jennifer y le explica que Lexi no está capacitada para ser modelo. Disgustada, empieza a hacer más dieta y acaba colapsando durante un partido de voleibol. La hospitalizan, le diagnostican anorexia nerviosa y la obligan a entrar en un programa de recuperación.

Sus padres tienen opiniones diferentes sobre su tratamiento y empiezan a discutir. Sin embargo, finalmente se recupera y le dan el alta. Le confiesa a su madre que Jennifer también tiene un trastorno alimentario, y una preocupada Kathryn informa inmediatamente a la madre de Jennifer. Aunque Pamela descarta la posibilidad de que su hija tenga esa condición, Jennifer se siente traicionada al enterarse y se niega a hablar con Lexi, de lo cual culpa a su madre. Lexi intenta enfrentarse a ella en una fiesta, pero una Jennifer borracha se marcha enfadada, sólo para ser atropellada por un coche. Es llevada al hospital y muere de un paro cardíaco.

Lexi tiene problemas para asimilar la muerte de su amiga y recae en su trastorno alimentario. Devastada, su madre intenta ayudarla, asegurándole que no puede culparse de la muerte de Jennifer. Su padre quiere que la hospitalicen de nuevo, pero Kathryn insiste en que puede ayudar a Lexi por sí misma. Consigue una orden judicial para hospitalizarla, pero al final Lexi es capaz de recuperarse por sí misma, animada por su madre.

La película termina cuando Lexi participa en un partido de voleibol, donde ve el espíritu de Jen que le sonríe, y gana el partido.